domingo, 26 de enero de 2020

Canadá

Lo tenía en el radar desde que salió en todas las listas de lo mejor del año, a principios de la década pasada. Pero aún recordaba las sensaciones agridulces que me dejó su "El día de la independencia" y me estaba haciendo el duro. De "El día de la independencia" me quedó los fantásticos diálogos entre el protagonista y su hijo adolescente, lo demás se me hizo cuesta arriba y tardé Dios y ayuda en llegar a la última página. En "Canadá" Ford, que tendría cuando lo escribió casi setenta castañas, te hace sentir todo lo que pasa por la cabeza de dos hermanos quinceañeros cuando sus padres desaparecen del mapa. "Canadá" no es sólo una novela mágica sobre hacerse adulto, la aventura donde va envuelta engancha con personajes y acontecimientos maravillosos.
Además, el nombre de la novela viene al pelo con los últimos acontecimentos en el trabajo. Un buen augurio.

lunes, 6 de enero de 2020

Visita a la casa del libro

Hacía ya tiempo que no caía por una Casa del Libro. Esta vez fue un poco por casualidad, y porque no cabía con el carrito en una tienda de disfraces chulísima que hay en Maestro Victoria donde la familia estaba mirando disfraces para Halloween. Y también llovía a mares. Todo pudo ser el destino intrigando para que entrase. Regresé con dos fichajes:

El libro de Héctor Abad estaba en mi lista. Como resistirse cuando uno de mis prescriptores de cabecera afirmó esto "Es el libro que más veces he regalado". Probablemente tenía las expectativas por las nubes, porque lo he leído con gusto pero no me ha dejado el poso que esperaba.

La mujer justa es mi primera incursión en Márai novelista - después de quedarme pasmado con sus increíbles  diarios. Lo cogí un poco a ciegas, de entre los dos o tres que tenían en las estanterías. La voz de los protagonistas de un triángulo amoroso entre burgueses y pobres de solemnidad sí que se te mete dentro. Leeré más cosas suyas seguro.